Facilitadores

Ernesto

Terapeuta, músico, mago con alegría y profundidad

Ernesto llegó a las medicinas guiado por una profunda sensación de que “debía haber algo más” en la vida. La ayahuasca fue la respuesta que le ayudó a salir de una insatisfacción persistente y le abrió el camino hacia un trabajo que hoy combina experiencia, sensibilidad y entrega.

Como facilitador, crea espacios seguros donde cada persona puede soltar sus defensas y conectar con lo más auténtico de sí misma. Con la mirada de quien ya ha recorrido ese camino, transmite confianza y valor para adentrarse en procesos profundos, incluso cuando implican atravesar miedos y viejas corazas.

Terapeuta, músico, mago… su música —la guitarra y el canto convertidos en Ícaros que acarician el alma— es capaz de transportarte, sanarte y transformarte. Tiene la capacidad de encender el fuego interior, abrir el corazón y guiar hacia estados de sanación y claridad. Su alegría y pasión pueden rescatarte de tus pozos más profundos, mientras sus conversaciones directas y libres de opinión iluminan esas partes de ti que más te cuesta mirar.

Ernesto es también un compañero cercano y creativo: escucha de verdad, aporta ideas nuevas, dinamiza al grupo y se implica en cada detalle del retiro. A veces con ternura y humor, a veces con la fuerza del león que habita en él, sabe encontrar el equilibrio perfecto entre la ligereza y la introspección.

Con Ernesto, cada participante encuentra un facilitador que no solo acompaña, sino que inspira y contagia amor por el viaje interior.

Ernesto

Terapeuta Gestalt – Monitor Sociocultural – Facilitador de Rebirthing y Circulos de Hombres

Edgar

Calidez, estructura y un corazón radiante

La llamada a este camino llegó a Edgar poco antes del confinamiento, en un momento en el que sentía un vacío que no podía llenar ni comprender. Buscando paz, confianza y amor propio, atravesó una espiral de tristeza y soledad tras varios tropiezos en la vida. El trabajo con las medicinas le enseñó a aceptar y entender su situación desde otra perspectiva, encontrando dentro de sí mismo todo lo que buscaba. Esto le permitió aprender a gestionar sus emociones y las circunstancias de la vida de una forma más amable y amorosa consigo mismo.

Hoy, esa experiencia se transforma en inspiración para acompañar a otros a alcanzar ese mismo estado de amor y comprensión hacia sí mismos. Aporta diferentes perspectivas, siempre desde el amor, la comprensión y la seguridad de que todo está bien y sucede como debe suceder.

En un retiro, su presencia es un refugio seguro. Siempre dispuesto a sostener en los momentos más duros, ofrece una atención constante, tanto en la quietud de la noche como en el flujo de las actividades diarias. Su calidez y sensibilidad pueden iluminar cualquier instante y sacar una sonrisa incluso en medio de la dificultad.

Edgar irradia un corazón tan grande como el cielo, una luz que parece no apagarse nunca. Su música, diferente y delicada, conecta con hilos de dulzura y profundidad que llevan a lugares internos muy sutiles. Aporta estructura y enfoque de manera sencilla y sin ostentación, manteniendo el orden exterior para que todo fluya.

Su capacidad para crear vínculos genuinos con cualquier persona, su entrega total al servicio y la fuerza silenciosa que transmite hacen que, en su compañía, sea fácil sentirse en casa.

Edgar

Maestro de Reiki – Masajista terapeutico – Facilitador de Wachuma – Alquimista

Coco Vero
Un océano de suavidad que canta mantras al corazón y te envuelve en luz y armonía.

En el 2023 la ayahuasca llamó a su puerta en un momento en el que sentía la necesidad de un cambio profundo. Desde su primera toma, se abrió a enfrentar miedos, liberar un gran dolor y descubrir verdades que transformaron por completo su vida. Ese fue el inicio de su camino de sanación.

Hoy, en cada ceremonia, su presencia es como un océano de suavidad que invita a relajarse, confiar y dejarse llevar.

Su ternura y dulzura femenina envuelven el espacio, haciendo que todo se perciba con más belleza. En sus manos, el harmonio se convierte en un canal de amor, y los mantras que entona parecen abrir puertas invisibles dentro del alma de quienes la escuchan.

Coco aporta una disciplina serena y un compromiso profundo con su palabra. Diseña sesiones de yoga con una precisión y sensibilidad excepcionales, incluso improvisando sobre la marcha según la energía del momento. Sus raíces en la música de la India y su conexión con el canto devocional impregnan el espacio de una energía que fortalece y serena al mismo tiempo.

Cuando te acercas a ella, puedes sentir cómo su compasión y su luz interna —nacidas de su propio proceso— crean un campo de confianza y acompañamiento. Es fácil sumergirse en su energía, dejarse contagiar por la armonía que irradia y tomar fuerza de la energía vital que guarda dentro. Y cuando, en mitad de la noche, su voz comience a cantar mantras, tal vez sientas que necesitas abrocharte el cinturón de seguridad cósmico.

Coco Vero

Profesora de Yoga Terapéutico – Formadora de Profesores – Coach en Desarrollo Personal y Espiritual

Monika

Fuerza femenina, calidez y claridad

La vida llevó a Monika a este camino a través de un llamado constante a escuchar profundamente: lo que se dice y lo que permanece en silencio en el cuerpo. Su propia experiencia de desafío y sanación le enseñó que el cuerpo nunca miente; guarda la verdad y las claves para la transformación. Paso a paso, siguiendo su conocimiento interior, convirtió este camino en su vocación.

En su presencia se siente con facilidad la claridad de que todo está bien y el viento a favor. Su energía combina dulzura, amabilidad y acogimiento de las sombras, junto con firmeza, alegría y una vitalidad siempre en movimiento. Aporta también una energía maternal que acoge y envuelve, haciendo que cualquier persona pueda sentirse en casa.

Le inspira acompañar a otros porque ama ese momento en que una persona se reconecta con su esencia y algo en su interior cambia, suavemente pero de forma irreversible. Ser testigo de la liberación de viejos patrones y del regreso a la autenticidad es para ella un privilegio y una fuente de belleza.

Monika aporta una presencia tranquila y centrada que genera confianza y seguridad. Tiene la capacidad de sentir el espacio, sostenerlo y guiar la energía del grupo con respeto y sensibilidad, encontrando a cada persona justo donde está y guiándola hacia las raíces ocultas de sus bloqueos. Siempre sonriente y dispuesta a compartir un abrazo y todo su amor, crea un entorno donde la transformación puede desplegarse de forma orgánica, respetuosa y fiel a cada individuo.

Monika

Psychobiology therapist – Somatic guide – Reiki master – Astrologist

Sostenedores y Apoyos Creativos 

Ricardo

Corazón inmenso y soluciones creativas

El camino de Ricardo comenzó siguiendo hilos muy distintos: algunos teñidos de curiosidad, otros con tonos de profunda oscuridad. Mirando atrás, ese arcoíris de experiencias le llevó hasta un presente en el que sus pies ya no caminan solos, asustados, tímidos o perdidos, sino acompañados por la certeza de sentirse protegido, querido y comprendido.

Lo inspira acompañar a otras personas porque cada encuentro abre la oportunidad milagrosa de contemplar la transformación mágica que ocurre en los participantes. Para él, es un privilegio cuando, como frente a un espejo, la complejidad única de cada persona revela su semejanza esencial con los demás. En ocasiones surge una conexión pura desde el primer instante, y en ese espejo se ve reflejado. Esa es, para él, la medicina más deliciosa: un misterioso elixir que sana y cuya esencia cae directa al alma.

En un retiro, Ricardo es un gran corazón y un alma capaz de entregarse con profundidad y sinceridad, sirviendo desde un amor incondicional que abraza y transforma. Es alguien con ganas, voluntad y ternura, y con la capacidad de resolver cualquier problema logístico. Su vasta experiencia y precisión para organizar lo convierten en el “pegamento” que mantiene la armonía y el flujo del equipo.

Su capacidad para encontrar soluciones es enorme: no se rinde, no tira la toalla y sigue adelante con una energía creadora que contagia. Se nota en su forma de inventar, improvisar y resolver, como si fuera una mezcla entre Walter White y MacGyver, pero sin explosiones ni laboratorios prohibidos. En la cocina, juega con ingredientes alternativos y saludables para nutrir de forma consciente, siempre disfrutando al ver estómagos satisfechos y sonrisas alrededor.

Detrás de todo, late un alma generosa que disfruta dando y compartiendo. Y aunque a veces su empuje también es su reto, su entrega y presencia son un recordatorio constante de que, cuando alguien pone el corazón en lo que hace, cualquier espacio se llena de confianza, calidez y posibilidades.

Tomás

Guardián de la tierra y alma profunda

Hubo un tiempo en el que Tomás se sintió atrapado en su propia existencia, moldeada por viejos traumas, patrones poco saludables y relaciones dolorosas. No veía luz al frente, navegando como un barco fantasma sin capitán en la niebla de la vida. No estaba muerto, pero tampoco verdaderamente vivo. La medicina le devolvió el timón de su ser, ayudándole a redescubrir el amor por la vida y por sí mismo. Los poderes sagrados de las plantas despertaron a su niño interior y le susurraron: “Todo va a estar bien”. Y así fue.

Acompañar a otras personas es para él un regalo. Le inspira compartir el conocimiento ancestral y cósmico de sanación, y ser testigo de la belleza de unos ojos que despiertan a una nueva realidad. Sabe que la transformación puede ser tan profunda que, en tan solo un par de noches, alguien se marcha como una versión completamente nueva de sí mismo. Cada persona que cruza la puerta trae consigo una lección única que enriquece a todos, y él camina ese camino junto a ellos.

En el retiro, es una presencia que transmite respeto, suavidad y amabilidad. Es un alma profunda, llena de conexión con lo trascendental, con una mirada compasiva y una dulzura que acompaña sin invadir. Tiene la capacidad de, sin muchas indicaciones, identificar lo que hace falta hacer, y hacerlo con limpieza, cuidado y entusiasmo, desde el principio hasta el final.

Su presencia evoca la sensación de estar con un guardián de la selva o incluso con un monje budista reencarnado. En sus manos, cualquier encuentro está impregnado de amor y generosidad. Se define como el “Hobbit de la Finca”: el guardián del lugar, que cuida el espacio para que cada llegada se sienta bienvenida, relajada y en casa. Su corazón y su amor están siempre presentes, creando un sentido de unidad y seguridad, donde todos se sienten conectados y abrazados por la energía del entorno.

Tomás aporta la paz de quien sabe escuchar y la determinación de quien cuida cada detalle. Su compromiso con el trabajo, su claridad mental y su ternura natural hacen que el proceso de cada participante se viva de una forma más amable, profunda y segura.