Viajando en grupo a solas

El viaje hacia casa

cada uno lo tiene que hacer en su interior, en su intimidad e independiente de cualquier conexión con grupos, conceptos o creencias.
Es lindo y da aliento tener compañer@s que acompañan durante una fase y luego cambian.
Tu hogar es siempre tu propio corazón, tu guía y brújula de tu camino es tu sentir y estar fiel a tu sentir.
Nos rozamos y acompañamos con la mejor intención, y sin embargo un día viene tu día cuando tendrás que irte, irte de todo y dejar atrás lo que pensabas tuyo.
Dejar atrás a tí también.
La muerte que nos espera a todos, lava y limpiará los trastos que hemos acumulado y todo pierda importancia y a la vez lo vemos en la luz desde lo eterno.
Como hojas en el otoño caerán nuestros sueños y identificaciones y brotará lo que realmente somos.
Aquí, debajo del agua, compartimos momentos juntos y un@ está más loc@ que el/la otr@.
Siempre busca en tu interior, la guía está allí.

Aquí afuera estamos todos con nuestros dramas y películas.
Allí dentro de ti es lo que siempre te acompañaba y lo que siempre buscabas.

La comunión de “herman@s” en el camino es solo un regalo y adorno alrededor de tu propio trabajo en solitario, en tu más íntima esencia.